La transición a Wayland es un proceso que se está eternizado y que está resultando bastante complejo, hasta el extremo de dividir a la comunidad con unas voces que piden acelerar la transición y otras deseando la descontinuación del protocolo para seguir con Xorg. La última voz conocida que se ha erigido contra Wayland es Simon Peter, creador de AppImage, que ha pedido explícitamente que Wayland sea boicoteado.
En una entrada publicada en su rincón de GitHub titulada “Boicotead a Wayland. ¡Lo rompe todo!”, Peter señala, según su punto de vista, que Wayland no arregla ningún problema, que ha roto casi todo lo que necesita utilizar y que parece centrado en GNOME. Otra cosa que denuncia es que está presuntamente delegando la solución de los problemas que causa en los desarrolladores terceros o que fuerza al uso de componentes impulsados por Red Hat y GNOME (recordamos que la relación entre GNOME, Fedora y Red Hat es muy estrecha), como Glib, Portals y Pipewire.
Después Simon Peter se dedica a denunciar las cosas que según él Wayland ha roto. Para empezar, tenemos las aplicaciones de screencasting, entre las que están las populares SimpleScreenRecorder y OBS Studio. Sinceramente, esto es en parte una pataleta de Peter porque habla de “roto desde”, cuando la realidad es que dichas aplicaciones posiblemente nunca hayan funcionado sobre el protocolo gráfico, o sea, que están rotas desde que Wayland existe.
Por otro lado, desde hace tiempo se está intentando soportar OBS Studio en Wayland y existe una versión Flaptak de la aplicación con el plugin obs-xdg-portal. El creador de AppImage recuerda la existencia de OBS Studio en formato Flaptak, pero denuncia que dicha versión está centrada en GNOME y las tecnologías impulsadas por Red Hat. Quizá merezca la pena recordar que Flatpak funciona perfectamente en Debian y que hasta hace poco GNOME era el único entorno de escritorio con soporte al respecto.
Pese a todo, algo hay que reconocerle a Simon Peter, y es que el screencasting es a día de hoy uno de los mayores tendones de aquiles de Wayland, independientemente de las circunstancias en torno a la situación. Sin duda este es un frente a resolver con urgencia, y a título personal, es el obstáculo que impide mi migración completa al “nuevo” protocolo gráfico, porque por lo demás hago de todo, incluso he podido disfrutar de sesiones maratonianas en Amazon Prime Video y he llegado hasta el final en juegos ejecutados con Proton como Alan Wake.
El otro punto presuntamente roto por Wayland es la compartición de la pantalla. En este apartado Peter menciona dos roturas de Jitsi, una colección de aplicaciones Open Source y multiplatafoma para VoIP, videoconferencia y mensajería instantánea. En referencia a uno de los bugs, acusa al protocolo gráfico de “romper cosas y dejar a los desarrolladores de aplicaciones indefensos e incapaces de arreglar el fallo, incluso si quisieran”. Otro ejemplo que expone es el de Zoom, cuyo soporte para Wayland está centrado en GNOME. Es importante tener en cuenta que Wayland se apoya en PipeWire para la compartición de la pantalla, que en su día fue presentado como proyecto para reemplazar a JACK y PulseAudio.
Los espectros de Qt y KDE también son blanco de las críticas de Peter. Por ejemplo, tenemos roturas del menú global de Plasma 5 y el hecho de que en las aplicaciones AppImage que no incluyan un plugin de Qt para Wayland se muestran rotas si se ejecutan sobre el protocolo gráfico.
Hay que reconocer que si la transición a Wayland está tomando tanto tiempo es porque las cosas se han hecho mal, y en más de un frente. Sin embargo, de la entrada de Simon Peter se puede apreciar una clara inquina hacia Wayland, GNOME y Red Hat, cosa que queda recalcada en lo que ha dicho en la zona de comentarios:
“No quiero a Wayland. Quiero a Xorg. Pero gracias por tu comentario. Y no estoy ‘gritando’, sino recopilando ejemplos con enlaces concretos para que los desarrolladores de Wayland puedan ayudar a arreglar la aplicación que rompieron. Pero sin introducir aún más dependencias de Red Hat.
Afirmando que ‘el futuro es Wayland’, 'Xorg es abandonware’, varias razones dudosas de ‘seguridad’, parece que a la gente de Wayland le gustaría que Wayland se convirtiera en el sucesor de Xorg, no en una alternativa opcional. Por lo tanto, espero que sea 100% compatible con las aplicaciones existentes, porque dudo que los desarrolladores de Wayland tengan los recursos para trabajar con todas y cada una de las aplicaciones para reparar la rotura que causaron. Si Wayland intencionalmente quiere ser diferente y romper cosas, no pueden asumir que todos dirán ‘genial, déjame invertir tiempo y dinero para cambiar mi aplicación que de otro modo sería perfecta’, especialmente si hacerlo significaría que el resultado solo funcionaría correctamente en Gnome. (y tal vez KDE) que han comprado mucho en la pila de Red Hat.”
Aquí nos encontramos con más pataleta por parte de Simon Peter, porque la responsabilidad de migrar las aplicaciones a Wayland es de los desarrolladores de las aplicaciones, no de los encargados de Wayland, e igual sería para una aplicación que funciona en Windows XP y aspira a hacer lo mismo en Windows 10. Sin embargo, sí es responsabilidad de Wayland y Pipewire ofrecer un marco estándar y fácil de trabajar para implementar o hacer uso de ciertas características, y a ser posible de forma compatible más allá de GNOME.
En resumidas cuentas, los que no quieran soportar Wayland que se queden atrás, y en el caso de las aplicaciones de screencasting la única imprescindible es OBS Studio. Las demás, si se creen imprescindibles, es que no son conscientes de su posición real.
Fuente: muylinux