Tal y como señalábamos el otro día, difícilmente iba a ser ese el último capítulo de la historia, una que comenzó hace años y que todavía da coletazos tan inverosímiles como este mismo. La historia, por supuesto, es la protagonizada por Red Hat y sus decisiones para con CentOS primero y, después, para con el cambio en la política de distribución del código de Red Hat Enterprise Linux (RHEL) anunciado recientemente y que deja a la compañía del sombrero rojo en una posición insólita con respecto a la licencia de código abierto que cubre la mayoría de sus productos.
De todo ello dimos cuenta en el artículo enlazado ahí arriba y que te servirá para ponerte al día, en el caso de que necesites un contexto. No obstante, como ya advertíamos y repetimos ahora, la cosa no podía terminar ahí y, de hecho, ya se dieron muestras de que no se iba a hacer, con dos de los principales clones de RHEL, AlmaLinux y Rocky Linux, preparando sus estrategias para continuar con su actividad. Otra reacción que teníamos pendiente contar es la de Oracle Linux, quizás el derivado de RHEL más polémico en todo este asunto, aunque de igual modo se daba por hecho que no se iban a quedar de brazos cruzados.
Oracle asegura la continuidad de su Unbreakable Linux y carga contra Red Hat
Y así ha sido. En un artículo titulado Mantengamos Linux abierto y gratuito: no podemos permitirnos no hacerlo, el gigante tecnológico no solo asegura la continuidad de Oracle Linux, sino que rebate casi punto por punto la postura esgrimida por Red Hat para intentar justificar una restricción del código de RHEL que choca de frente con la licencia GPL. Y no solo eso: hasta lanzaban la caña por si acaso «eres un desarrollador de Linux que no está de acuerdo con las acciones de IBM y cree en la libertad de Linux según la practicamos, estamos contratando».
Sin duda, el fondo de la postura de Oracle era el esperado, como lo era en el caso de los clones (y quedan más por pronunciarse), no así una respuesta argumento por argumento con un tono tan contundente. Cabe señalar que de todos los clones de RHEL, Oracle Linux es el más veterano y el más extendido comercialmente. Uno que le hace competencia a la distribución en la que se basa con gratuidad total y sin límites en el uso del sistema, cuyo valor añadido encuentran en la integración del mismo con herramientas propias y en la venta de soporte técnico.
SUSE entra en escena con Liberty Linux, su propio clon de RHEL
Lo que sí es una sorpresa es el paso adelante que acaba de dar SUSE, y es que en los últimos días podíamos leer en el blog de la compañía artículos en relación al movimiento de Red Hat, en defensa del modelo de código abierto y hasta proponiendo a openSUSE como alternativa a CentOS (aviso a navegantes: no lo es, salvo para casos específicos), guía de introducción incluida. Sin embargo, cualquier atisbo de equidistancia acaba de saltar por los aires con el anuncio de SUSE Liberty Linux.
A modo de previa, SUSE amagó con el anuncio de SUSE Liberty Linux hace más de un año, antes de anunciar Adaptable Linux Platform (ALP), la renovada base tecnológica en la que trabaja la compañía para la nueva generación de SUSE Linux Enterprise (SLE). Todo lo que dijeron entonces era que SUSE Liberty Linux sería «un nuevo plan de soporte que incluye a CentOS y hasta a RHEL», algo que se interpretó como un gancho para atraer clientes hacia SUSE. Es más, desmintieron a un exempleado que hablaba de distribución y, por lo que se ve, no se equivocaba.
Según se puede leer en el blog de SUSE, en un artículo firmado por el nuevo CEO de la compañía, el veterano de Red Hat Dirk-Peter van Leeuwen, en SUSE propiciamos la elección, toda una declaración de intenciones que se sustenta en el anuncio que nos ocupa y que, de una vez por todas, despeja las dudas que se pudieran tener en torno a qué es SUSE Liberty Linux. «Ser más privativo no debería ser la base de la competencia entre empresas de código abierto», apunta van Leeuwen, añadiendo que «con las últimas restricciones a la disponibilidad del código fuente [de RHEL], creemos que el panorama competitivo está cambiando en la dirección equivocada».
El anuncio es el de SUSE Liberty Linux, obviamente, una bifurcación de Red Hat Enterprise Linux (RHEL) totalmente compatible y disponible públicamente sin restricciones, es decir, un clon a nivel binario de RHEL como lo era CentOS y como lo son Oracle Linux, AlmaLinux o Rocky Linux, uno de los primeros en apoyar esta iniciativa. Para asegurar su mantenimiento, la compañía invertirá 10 millones de dólares a lo largo de los próximo años. «Esta inversión preservará el flujo de innovación en los años venideros y garantizará que los clientes y la comunidad no estén sujetos a la dependencia de un proveedor y tengan opciones genuinas tanto mañana como hoy», explica van Leeuwen.
«La comunidad empresarial de Linux requiere estandarización, estabilidad y consistencia», recoge el anuncio las palabras de Gregory Kurtzer, director ejecutivo de CIQ y fundador de Rocky Linux. «CIQ brinda estabilidad a nuestros socios, clientes y comunidad mediante la creación de una amplia coalición de empresas, organizaciones e individuos con ideas afines. SUSE ha encarnado los principios básicos y el espíritu del código abierto; CIQ está encantado de colaborar con SUSE en el avance de un estándar Linux empresarial abierto», añade el nuevo socio de SUSE.
Cualquier interesado encontrará toda la información sobre SUSE Liberty Linux, la que está disponible, al menos, en la página del producto. Eso sí, de momento descarga no hay.
Por otro lado, cabe aclarar que SUSE sigue comprometida con el desarrollo de sus propias soluciones, de SUSE Linux Enterprise a openSUSE, así como con la futura Adaptable Linux Platform y con todos los productos y servicios que forman parte de su oferta.
Imagen: Pexels
Fuente: muylinux