La transición de Debian a systemd ha sido uno de los episodios más dramáticos de la historia de GNU/Linux. Los defensores y detractores del mencionado init dentro de la comunidad de Debian se enzarzaron en un más que encarnizado debate cargado de profundos detalles técnicos, pero de que desde la superficie podría ser entendido como “estándares” frente a la “filosofía Unix”.
Tras un agrio debate que llevó a la dimisión de algunos miembros destacados de Debian, tanto a favor como en contra de systemd, el init principalmente impulsado por Red Hat se erigió como el vencedor. Dicha decisión tuvo dos consecuencias: la claudicación de Canonical y la aparición de Devuan, una distribución impulsada por aquellos miembros de Debian que no están de acuerdo con systemd.
Hace cinco años nos preguntamos si systemd se había quedado en Debian de forma definitiva, ya que las heridas se cerraron en falso y todavía había muchos miembros de la comunidad que seguían sin estar de acuerdo con la utilización de dicho init. Y sí, tan falsamente se cerraron las heridas que recientemente ha habido una nueva votación para determinar si en Debian sería mejor soportar soportar diversos inits o encerrarse en systemd, habiendo sido las opciones las siguientes:
- Opción 1, propuesta F: Foco en systemd
- Opción 2, propuesta B: systemd pero apoyamos la exploración de alternativas
- Opción 3, propuesta A: El soporte de sistemas de inicio múltiples es Importante
- Opción 4, propuesta D: Soporte para sistemas distintos de systemd, sin bloquear el avance
- Opción 5, propuesta H: Soporte para la portabilidad, sin bloquear el avance
- Opción 6, propuesta E: Soportar múltiples sistemas de inicio es un Requisito
- Opción 7, propuesta G: Soporte para la portabilidad y de las implementaciones múltiples
- Opción 8: Profundizar en la discusión
La propuesta vencedora en la votación ha sido la B, que fue presentada por el actual líder del proyecto, Sam Hartman, y viendo que es lo que se aplicará a partir de la futura versión de la distribución, recogemos lo que dice:
Haciendo uso de la capacidad que le otorga la sección 4.1 (5) de la Constitución, el proyecto emite la declaración siguiente que describe su posicionamiento actual respecto a los sistemas de inicio, sistemas de inicio múltiples y uso de las utilidades de systemd. Esta declaración describe el posicionamiento del proyecto en el momento de su adopción. El posicionamiento del proyecto puede evolucionar con el tiempo sin que sea necesario recurrir a nuevas resoluciones generales (RG). El procedimiento de RG seguirá estando disponible si el proyecto necesita una decisión y no puede alcanzar un consenso.
El proyecto Debian reconoce que las unidades de servicio de systemd son la configuración preferida para describir cómo arrancar un daemon o servicio. Sin embargo, Debian continúa siendo un entorno en el que desarrolladores y desarrolladoras, y usuarios y usuarias pueden explorar y desarrollar diferentes sistemas de inicio y alternativas a las funcionalidades de systemd. Quienes estén interesados o interesadas en explorar tales alternativas tienen que proporcionar los recursos de desarrollo y de empaquetamiento necesarios para llevar a cabo ese trabajo. Tecnologías como elogind, que facilitan la exploración de alternativas mientras se ejecuta software que depende de algunas interfaces de systemd, siguen siendo importantes para Debian. Es importante que el proyecto apoye el esfuerzo de los desarrolladores y desarrolladoras que trabajen en tales tecnologías cuando haya coincidencia entre las mismas y el resto del proyecto, por ejemplo revisando parches y participando en debates de manera regular.
Los paquetes deberían incluir unidades de servicio o scripts de inicio para arrancar daemons y servicios. Los paquetes pueden utilizar cualquier utilidad de systemd según el criterio del o de la responsable del paquete, siempre y cuando lo hagan de forma consistente con otros requisitos del manual de normas y con la expectativa tradicional de que los paquetes no deberían depender de funcionalidades experimentales o no soportadas (en Debian) de otros paquetes. Los paquetes pueden incluir soporte para sistemas de inicio alternativos además de para systemd y pueden incluir alternativas para cualquier interfaz específica de systemd que usen. Los y las responsables utilizan sus procedimientos normales para decidir qué parches incluir.
Debian está comprometido con la colaboración con distribuciones derivadas que hagan diferentes elecciones de sistemas de inicio. Como con todas nuestras interacciones con los proyectos derivados, los y las resposables implicados e implicadas trabajarán con dichos proyectos para entender qué cambios tiene sentido incorporar a Debian y cuáles permanecen exclusivamente en la distribución derivada.
La posición defendida por Sam Hartman es relativamente intermedia, ya que a pesar de no cerrarle la puerta al soporte de inits alternativos, systemd se mantendrá como la referencia. A veces las decisiones intermedias no contentan a nadie, y por la red se está empezando a ver opiniones de todo tipo, con algunos interpretando que esto es un golpe a systemd y otros diciendo que en el fondo nada cambiará y que esto podría conllevar trabajo adicional para soportar correctamente los inits alternativos.
En resumidas cuentas, Debian se queda con systemd, pero sin cerrar la puerta.
Fuente: muylinux