Hay cosas del mundo GNU/Linux y el software libre en general que me encantan, otras que detesto y a veces hay cosas que me son indiferentes, no me llaman la atención.
Desearía que me conocieras un poco más. Mis gustos, manías y disgustos en la vida cibernética ya que hay cosas que ni te imaginas.
La navegación
Generalmente cuando navego tengo mucho cuidado de no entrar en páginas con ads, anuncios por doquier, publicidad entre medio de un artículo..dale un Me gusta en Facebook.. Cuando entro en una página así, salgo por patas. De hecho uso programas de lecturas RSS en el escritorio para leer los titulares de las noticias y la entradilla.
Creo en un internet más limpio, en una navegación fluida sin tanta molesta publicidad comercial y estúpidos ads que te envían a páginas inseguras. En mi humilde opinión, creo que deberían ser prohibidos y denunciables los ads que llevan a páginas engañosas. Porque no es lo mismo el hacer clic en un enlace a posta, que se te escape el puntero del ratón sobre el texto de lectura (ya malicioso) y te aparezca una nueva ventana vomitiva de publicidad. No, las extensiones del navegador poco hacen para detener la invasión publicitaria, exceptuando NoScripts.
Mis navegadores favoritos son Firefox y Brave (desgooglizado). No he usado ni probado un navegador privativo, por lo que más que el rendimiento, o las opciones que tenga, lo que me importa es que sea libre y lo más seguro posible. También estoy muy interesado con Falkon pero no lo usaré hasta que soporte la sincronización de cuenta para conservar tus favoritos, cookies, etc. cuando instalas una nueva distro.
Uso los buscadores DuckDuckGo y Startpage, nunca los de Google directamente. Y debido a la variedad y el interés por la ciencia, como la astrofísica o los documentales, tampoco uso Youtube, sino su espejo Invidio, que limpian los vídeos de scripts de seguimiento y publicidad.
La seguridad
No, no soy un paranoico con la seguridad en mi vida diaria. Sí con el blog, tengo extensiones para impedir ataques masivos y filtros de países que no quiero que tengan acceso a la caja de comentarios para arruinarla con spam. Sin embargo en casa, ante mi PC no me quita el sueño el tema de seguridad, aunque claro, trato de instalar paquetes de los repositorios oficiales y usar AppImages. No me gustan los Snaps y los Flatpaks, por lo que jamás los uso.
Cuido de no usar mucho el privilegio de superadmin. Ah, dependiendo con quien, suelo usar Enigmail y la clave GPG, es decir, correos cifrados, como por ejemplo, con compañeros de la FSF y amigos que así lo desean (un saludo a Echedey).
Por tema de rastreo y seguridad, uso con Firefox algunas extensiones como Privacy Badger, uBlock Origin, y Privacy DuckDuckgo Essentials.
Mi actitud es cuanto a seguridad es básica.
Las distros
Como distrohopper, cambio con mucha frecuencia de distro, quizás con demasiada frecuencia. Mis favoritas son las basadas en Arch con el entorno de escritorio KDE Plasma siempre. Después le sigue Debian en su rama Testing.
Lo único que personalmente acepto de carácter privativo, es algún firmware necesario, por ejemplo, para conectar WiFi, pero en mi caso particular, mi tarjeta de red soporta drivers libres y no veo necesario tener ese firmware. En cuanto al controlador de vídeo, mi máquina tenía una placa NVIDIA pero la quité y compré una AMD que es compatible con los controladores libres también.
Me gustan, como dije, las Arch. Dentro de ellas mi favorita es Cleanjaro y Parabola. En el caso de las distros Arch, compilo un Kernel libre y el firmware libre para deshacerme de blobs y firmware que no necesito. Con Debian no tengo que hacer nada de eso porque su firmware y Kernel son libres 100%. Lo único que hago es eliminar los repositorios Contrib y Non-free y dejar sólo el repo Main.
Si con la seguridad no soy exigente, sí lo soy contra el código privativo. Además, ¿que voy a decir al respecto si ya lo sabes?
Las distros más o menos famosas que no me llaman la atención son CentOS, MX Linux, LFS, así como la mayoría que se basan en Ubuntu. CentOS porque no la veo como una distribución de uso diario sino para servidores, empresas, y creo que le dedican demasiado espacio en la red para tan poco uso. Por supuesto que son manías mías, no hablo de la calidad de las distros. Pueden ser excelentes pero algunas no me levantan interés.
MX Linux me ha estropeado dos veces el contenido de un pen USB, así que mucho cariño no le tengo. Distros LFS, tipo Alpine, NixOS nunca me han despertado interés. Las distros basadas en Ubuntu son tantas que cuando leo sobre una distro nueva basada en Ubuntu, me da mucho cansancio, porque por mucho que cambies de traje a la mona, mona se queda.
Los escritorios
A estas alturas todos saben que mi entorno de escritorio predilecto es KDE Plasma. Es así desde sus inicios y sólo me retiré con la aparición de KDE 4.
Después de KDE Plasma le sigue Cinnamon. GNOME 2 jamás me gustó, prefiero GNOME-Shell, pero en general, no soy usuario acérrimo ni mucho menos de los gnomos.
Sobre Enlightenment opino que es sorprendentemente veloz y bonito, pero considero que es para vacilar con los amigos. Se me hace muy difícil trabajar con este entorno. Los escritorios simples nunca los uso, prefiero los visualmente modernos y cuidados.
XFCE lo considero poc agraciado pero necesariamente ha de ser así para conservar su escaso consumo y lividez. Por cierto, ¿he dicho alguna vez que no instalo nunca distros con apariencia antigua y que no soporto los iconos Adwaita?
Las BSD
Los sistemas operativos BSD me atraen mucho. Es un experiencia UNIX similar a GNU/Linux.
Pruebo con frecuencia FreeBSD y GhostBSD. Entre otras cosas, no traen software privativo por defecto. Por esa razón (y otras) es posible que tu máquina no funcione con este sistema operativo. BSD, a diferencia de muchas distros GNU/Linux, cuida mucho su licencia libre.
Las licencias
La licencia de software libre que más me gusta es la GPLv3. La GPLv2 y LGPL no me gustan, aunque no me opongo a utilizarlas. De las libres, pienso que la que garantiza un futuro que no dependamos de lo privativo, es la GPLv3. Esta licencia no permite privatizar el código y es bastante restrictiva (restrictiva con el componente privativo, no con el usuario). Las restantes GPL tienen cláusulas que no garantizan que un software siga siendo libre. Son libres, sí, pero bastante anárquicas, como la MIT y similar a la BSD. Toda licencia que permita convertir, tomar código del software libre para privatizar, va contra el software libre por la sencilla razón de que da vía libre a que el privativo siga extendiéndose. El código privativo es mi enemigo y comparto la opinión de Richard Stallman cuando lo denomina “malware”.
Los programas
Por filosofía, jamás uso software privativo, por lo que pedirme la opinión de cualquier programas de estos me quedaría en ascuas, porque ni lo se ni me interesan.
Dentro del software libre, como he citado arriba, para navegar uso principalmente Firefox, mi gestor de correos es Thunderbird, para chatear con los amigos, Telegram, que como cliente es software libre pero no lo es su servidor, pero ya hablaríamos de un servicio. De todas formas, en nuestro grupo de Telegram estamos hablando de migrar a otro cliente con características similares a Telegram pero sin servidor privativo.
Ni que decir tiene recordar que soy fan de LibreOffice, aunque a veces utilizo OnlyOffice. Para torrent, uso Qbittorrent o Transmission-qt. Me gustan mucho también Inkscape y GIMP para crear, retocar imágenes.
Los programas o categorías que no me gustan son los juegos y los dockers. No se, creo que lo segundo es muy importante, pero no suelo mostrar interés en ello. El bombo que se le da a programas privativos desde la mayor parte de la blogosfera es otra cosa que me causa repulsión. Fomentan el uso de nuestro enemigo, y eso es la luz contra la oscuridad.
Hasta aquí he reflejado algunas cosas que me gustan y las que no. Hay más, pero cansaría demasiado.
Fuente: maslinux
