Una amiga me estuvo contando que su ordenador portátil Samsung R730, que tiene ya unos años, iba muy lento. Se me ocurrió cambiarle el HDD por un SSD que tenía yo de otro ordenador para piezas. La propuse el cambio y aceptó. En el nuevo SSD tras instalar Linux Mint, me dio el mismo problema que en la distribución Kubuntu que utilizaba antes mi amiga en el antiguo HDD.
Problema
Lo que ocurría era que no podía subir ni bajar el brillo de la pantalla del portátil. No podía ni desde los ajustes ni con la típica combinación de teclas Fn.
Buscando el problema en internet di con varias páginas, pero al final, la que seguí fue esta. Según comentan en la solución propuesta también sirve en el Dell L702X además del Samsung R730 y R530, aunque es probable que funcione en otros modelos de portátil con gráfica Nvidia. En concreto, el portátil de mi amiga utilizaba la gráfica NVIDIA GeForce 310M.
Solución
Para seguir esta tutorial es necesario tener los drivers o controladores propietarios de Nvidia instalados. Yo los instalé muy fácilmente a través del Administrador de controladores de Linux Mint.
Abrimos la terminal y ejecutamos el siguiente comando para generar el fichero de configuración /etc/X11/xorg.config del servidor gráfico X:
sudo nvidia-xconfig
Editamos el archivo de configuración:
sudo nano /etc/X11/xorg.conf
Buscamos Section "Device" y dentro de ella añadimos la siguiente línea:
Option "RegistryDwords" "EnableBrightnessControl=1"
Quedando de esta manera:
Para finalizar, reiniciamos el ordenador y ya deberíamos poder ajustar el brillo de nuestro ordenador portátil.
Fuente: lignux
