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Parece que estamos ante el final, amigos. Si todo va según un plan que preferiríamos no tener, la edición de noviembre de Linux Journal fue la última.

El simple hecho es que nos hemos quedado sin dinero y opciones junto con eso. Nunca tuvimos un padre corporativo adinerado detrás y la financiación vino de nuestros propios bolsillos, y eso nos convirtió en una anomalía entre los editores, de principio a fin. Si bien fuimos capaces de volar cerca del suelo durante mucho tiempo, perdimos la poca elevación que tuvimos en noviembre, cuando la balanza finalmente se inclinó irrevocablemente hacia lo negativo.

Si bien vemos un futuro como el pasado de las publicaciones, cuando los anunciantes patrocinan una publicación porque valoran su marca y sus lectores, el mundo publicitario que tenemos hoy preferiría captar la atención, preferiblemente colocando balizas de rastreo en los navegadores de los lectores y eliminándolas con anuncios en cualquier lugar. Esos lectores aparecen. Pero ese futuro no está aquí, y el pasado se ha ido.

Hay alguna esperanza, suponemos, de que un salvador pueda llegar; pero tendrá que estar dispuesto a recoger parte de nuestra deuda, además de nuestra marca, nuestro archivo, nuestros dominios y nuestros suscriptores y lectores. Si conoces a alguien que pueda hacer una oferta seria, avísanos. De lo contrario, mira LinuxJournal.com y espera que al menos nuestros archivos heredados (que se remontan al nacimiento de Linux Journal en abril de 1994, cuando Linux tocó 1.0) no desaparezcan. Hay muchas cosas geniales aquí, y mucha historia que odiaríamos que el mundo pierda.

Nuestro mayor pesar es que ni siquiera tenemos dinero suficiente para devolver a las personas que más nos han valorado: nuestros suscriptores. Por eso no podríamos disculparnos más profunda o sinceramente. Lo que tenemos para los suscriptores:

Linux Pro Magazine ha ofrecido a nuestros suscriptores seis números gratuitos de su revista, una publicación que nosotros en Linux Journal siempre hemos admirado. En nuestro momento de necesidad, ellos fueron los primeros en llegar allí y estamos agradecidos por su generosa oferta. También terminamos hoy nuestro archivo 2017, que incluye todos los números que hemos publicado, incluidos el primero y el último. Normalmente vendemos eso por $ 25, pero obviamente los suscriptores lo obtendrán sin costo.

También esperamos que haya algo de consuelo en saber que trabajamos muy, muy duro para mantener Linux Journal funcionando, y lo hemos estado haciendo durante mucho tiempo, ejecutando la operación más pequeña posible. Somos una colección en su mayoría de voluntarios, y algunos de nuestros empleados no han recibido pagos en meses. Todavía debemos dinero a los trabajadores independientes también. Hay un límite de cuánto tiempo un editor puede mantener esas negligencias, y ese límite ahora se ha alcanzado.

Ha sido una gran carrera, amigos. Un gran regalo para todos los que contribuyeron a nuestro nacimiento, nuestro éxito y nuestra persistencia durante estos muchos años. Ahora correríamos los créditos, pero la lista sería demasiado larga, y el riesgo de dejar a gente digna sería demasiado alto.  Nuestro agradecimiento nuevamente.

 

Fuente: Original | maslinux

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