Canonical ha anunciado la publicación de la beta de Ubuntu 23.10 “Mantic Minotaur”, la futura versión de la distribución Linux más popular y que solo contará con nueve meses de soporte. Sin embargo, este lanzamiento puede ser más importante de lo que aparenta viendo que precede a la próxima LTS.
Al contrario de lo visto en Fedora, donde el más de lo mismo pero puesto al día es la tónica, Ubuntu 23.10 Beta llega con algunas novedades de calado. Para empezar está el hecho de que la compilación Snap de Firefox funciona de forma nativa sobre Wayland por defecto. Esto es algo de lo que la versión Flatpak no puede presumir todavía y es un movimiento un tanto sorprendente si vemos la trayectoria de Canonical en lo que respecta a la adopción del protocolo.
Otra novedad importante es la recuperación en el nuevo instalador del soporte para ZFS, ese sistema de ficheros que siempre ha dado quebraderos de cabeza en Linux por cuestiones de licencias. La responsable de Ubuntu todavía tiene otros seis meses para seguir puliendo la experiencia en este frente, pero este servidor no ha visto nada extraño en las dos instalaciones del sistema que ha llevado a cabo sobre GNOME Boxes.
La seguridad es otro aspecto que será reforzado en Ubuntu 23.10 con el soporte de cifrado completo de disco respaldado por Trusted Platform Module (TPM), el módulo criptográfico que está presente en las placas base modernas y que proporciona cifrado, seguridad y privacidad. A nivel práctico lo que pretende es evitar que los atacantes logren acceso a datos sensibles sin las credenciales ni las claves privadas almacenadas en el módulo.
Aunque las placas base UEFI y muchas de sus características siguen generando controversia en la comunidad de Linux, la realidad es que las principales partes implicadas en el desarrollo del sistema están trabajando para soportarlas, empezando por el siempre polémico systemd. Y por si alguien pregunta, sí, TPM es uno de los requisitos de Windows 11 que impiden o limitan su instalación en computadoras con algunos años.
Los PPA son otra área que será mejorada en Ubuntu 23.10, tanto a nivel de gestión como de seguridad. A partir de ahora los PPA serán almacenados en sus propios ficheros de fuentes con las claves incrustadas, lo que asegura que la clave sea eliminada cuando el usuario borre repositorio. Este enfoque también mejora la seguridad al hacer que la clave solo se use para su propio repositorio.
Los componentes básicos de Ubuntu 23.10 Beta son GNOME 45, Linux 6.5, Mesa 23.1.7, systemd 253, APT 2.7.3 y Snap 2.60. La publicación del sistema como estable está programada para el 12 de octubre del presente año, una fecha que se cumplirá salvo que surja algún problema muy importante a última hora. Los que quieran probar la beta pueden obtenerla desde aquí.
Fuente: muylinux