Aunque lo normal en la instalación de una distribución Linux sea hacerlo mediante un Live CD (o DVD) y con el tradicional asistente gráfico, también es posible hacer una instalación por red, y para ello sólo tenemos que usar una imagen de pocos Mbytes, por ejemplo la imagen de Ubuntu 11.10 solo nos ocupa 23 Mbytes.
Este método de instalación es muy útil si tenemos una conexión por red aceptable, ya que nos permite seleccionar qué queremos instalarnos, podemos elegir si nuestro entorno de escritorio es GNOME, KDE, Xfce o LXDE, o si queremos usar nuestro sistema como servidor de correo, servidor web, etcétera. Es decir, nuestra mínima imagen nos servirá para poder instalar si queremos Ubuntu en un equipo y Kubuntu en otro si así lo deseamos sin necesidad de descargarnos o pedir dos CDs distintos.
Igualmente este método de instalación nos permite tener nuestro sistema recién instalado completamente actualizado , ya que al conectarse por red nos descarga e instala siempre las últimas versiones existentes en los repositorios, al contrario que en la instalación tradicional que lo primero que tenemos que hacer nada mas instalar nuestro sistema es efectuar una actualización que nos obliga a reiniciar nuestro sistema para que esté completamente actualizado.
Una vez hayamos grabado nuestra imagen en un CD arrancaremos nuestro sistema, elegiremos el idioma que queramos, posteriormente indicaremos el teclado que vamos a usar , elegiremos el país en el que estamos y automáticamente nuestros repositorios quedarán creados.
Posteriormente se nos configurará la conexión de red (si accedemos a través de un proxy podemos configurarlo). Una vez en este punto configuraremos nuestra ubicación para determinar la hora del sistema y pasaremos a particionar el disco pudiendo elegir la opción recomendada si ese es nuestro deseo.
Una vez en este punto el asistente de instalación descargará de la red la última versión del sistema básico y nos lo instalará en nuestro disco duro, este proceso tardará un rato dependiendo de la velocidad de nuestra conexión a Internet, así que podemos ir a tomarnos un refresco o un café si nos apetece. Una vez instalado el sistema básico agregamos nuestro usuario nos preguntará que queremos instalar. Por defecto no instalará nada, así que es importante que seleccionemos qué entorno de escritorio queremos instalar, para ello usaremos la barra espaciadora.
Una vez hayamos elegido qué queremos instalar solo nos queda espera a que termine la instalación, reiniciaremos nuestro equipo cuidando de quitar el CD al arrancar y ya tendremos nuestro sistema perfectamente instalado, completamente actualizado y listo para usar completamente personalizado a nuestro gusto.
Fuente: muylinux