Aunque ya se ha tratado en este blog sobre este magnífico programa, no hay que dejar de comentar una de las posibilidades que tiene como funcionalidad accesoria a los paquetes de mantenimiento de Linux: la de crear una imagen exacta de nuestra PC para que en caso de que resulte necesario sea posi restaurarlo a un estado anterior.
¿Quién, procediendo del mundo de Microsoft, no ha echado de menos en Linux algo parecido a un punto de restauración? ¿Quién, pasado un tiempo de uso de Linux (sino se han llevado a cabo frecuentemente tareas de limpieza de ficheros de configuración inservibles, paquetes, etc.), no tiene la impresión de que su sistema está “sucio” y decide reemprender la tarea de formatear y reinstalar los programas de uso más frecuente? O, más sencillo aún: ¿quién no se ha arrepentido de instalar algo o, una aplicación no funciona como quisiera y querría volver a tener su máquina tal como estaba antes de la “funesta experiencia”. Si tan solo hubiera un punto de restauración como en Windows...
Esto es algo que se ha echado en falta a Linux más de una vez. Aunque, también hay que decir que los puntos de restauración de Windows no dejan el sistema exactamente tal como estaba antes de la instalación de una aplicación. Esto lo podemos ver fácilmente editando el registro de Windows y viendo que, después de la restauración a un estado anterior, existen referencias en el registro de ficheros que correspondían a los de la instalación de la que se pretende eliminar cualquier residuo.
En este mismo blog se ha publicado recientemente una referencia al gestor de paquetes Guix que contiene esta funcionalidad (la de crear puntos de restauración).
Aún así, la posibilidad de utilizar clonezilla, parece realmente atractiva ya que no sería necesario quitar componentes en forma individual, devolvería el ordenador al estado de la imagen que se creó , y esto implicaría no tener que reconfigurar tamaños, temas, etc.
También existe en este blog una referencia al uso de Clonezilla con un videotutorial por lo que no repetimos nada de su forma de manejo. Personalmente utilizo para el propósito que indico un disco duro externo conectado por puerto usb y elijo la opción disco a imagen (y para restarurar, imagen a disco) usando la opción 'Beginner' cuando el programa de clonación da a elegir el nivel de usuario deseado ya que con ello se cumplen las expectativas al propósito.
Por último cabe mencionar a Gofris. Gracias a este programa, muy útil para quienes posean un cibercafé o experimenten mucho con su máquina, los programas se olvidarán de los cambios realizados en el sistema una vez que reinicies. Tanto la modificación de los archivos como las configuraciones desaparecerán al reiniciar el equipo. Una vez aplicada la función de "congelar" a partir de ahí podés hacer cambios en tu máquina, probar software potencialmente peligroso y realizar las maniobras que quieras, ya que al reiniciar el sistema todo volverá a estar como estaba antes de "congelarlo".
Fuente: usemoslinux
