La mayoría que nos hemos pasado de Windows a GNU/Linux lo hemos hecho porque terminamos asqueados por los virus, troyanos, porque nos espiaban, nos inundaban de publicidad hasta en el escritorio, porque todo es finito y nada es duradero. Porque todo es puto mercado, porque todo es capitalismo bestial.
Es muy triste que una distribución GNU por defecto incluya programas de código cerrado. Ya no que sea posible hacerlo más tarde si el usuario lo desea, ni que siquiera antes de instalar, como hace Ubuntu y todas sus derivadas te pregunten si deseas algún software privativo, sino que violen un sistema que es software libre, introduciendo el sucio. Nos quieren secuestrar GNU los libertinos. Tan sólo hay que ver cómo se han puesto por decir la verdad, que es única: Una distribución GNU/Linux no debe de llevar software privativo por defecto. En manos del usuario, que HAGA LO QUE LE DE LA GANA. Porque o no se entiende o no se quiere entender. El tema no es que alguien sea libre o no para usar lo que le de la gana. Eso nadie lo discute. Abrid las orejas: Un sistema operativo GNU es Open Source y no puedes presentar un sistema Open Source con programas privativos PORQUE NO SERÍA OPEN SOURCE. ¿Lo entendéis ya? Después de instalado, como si os cortáis las venas o las dejáis crecer. Porque la libertad no es poder hacer lo que te plazca sino evitar que lo privado inunde lo público. ESO ES LA LIBERTAD, y esos son los que intentan meternos el caballo de Troya. Y a esos traidores los conocerás porque dirán: Si no te gusta lo quitas. Cuando lo correcto es: Si te gusta, lo instalas después. Pero de entrada, software privativo por defecto NO.
Los esclavos del software privativo y otros traidores te llaman “fanático” por el hecho de pedir que se cumpla con la licencia GNU GPL de GNU/Linux. Claro, el fanático es uno por protestar cuando los devs por cuatro perras meten software privado, sin que lo apruebe el usuario final. Te dicen los desarrolladores de esas distros que tal programa privativo es más compatible con otro programa privativo y van los tontos y aplauden con las orejas. Se lo creen, les venden la moto cuando lo que buscan es dinero a costa de cargarse el espíritu Open Source.
Y sí, he usado muchas veces Manjaro pero me las vi de venir. Cuando vi la última vez en el menú los accesos a MS Office me acordé de la familia de quien puso eso ahí.
No, no me callaré, seguiré denunciando cada aberración que se cometa contra GNU. Aunque del avispero salgan las avispas dispuestas a picar, les espero con la verdad.
GNU vencerá. Estoy seguro. Esa panda de ratas traidoras que quieren meterla doblada fracasarán.
Fuente: maslinux
