Cuando Netscape liberó el código fuente de su navegador web en 1998, parecía un movimiento desesperado por una empresa asediada por Microsoft, que terminó vendida un año después a AOL. Actualmente, no pasa una semana sin que una empresa de tecnología anuncie el lanzamiento de una nueva plataforma, aplicación o extensión, junto a su código fuente, bajo licencia libre Open Source.
En el último año, hemos visto movimientos importantes como el de Apple liberando el código detrás del lenguaje de programación Swift; Google haciendo lo propio con el marco de aprendizaje de máquinas TensorFlow; Microsoft con el motor de JavaScript Chakra que utiliza el navegador de Windows 10, Edge, o Facebook, añadiendo una gran cantidad de proyectos de código abierto incluyendo React Native y Relay.
La aparición de empresas como Facebook, Airbnb y SquareAirbnb, convirtiéndose en importantes jugadores del Open Source cuando sus negocios quedan fuera del mundo del software comercial, es particularmente interesante. Si bien pueden seguir los principios en que se basa el software de código abierto tradicional, como Linux, las razones de su apertura no son simplemente el altruismo y el bien común.
La liberación del código abierto aumenta su imagen como empresas innovadoras, lo que les ayuda a contratar ingenieros. También ayuda a crear estándares de facto, con startups adoptando su forma de escribir código. Y en algunos casos, puede acelerar el desarrollo de industrias enteras.
Mención especial a Microsoft y sus últimos movimientos en torno a Linux, seguramente el desarrollo más importante del Open Source. Largo tiempo ha pasado desde que Steve Ballmer declarara que “Linux era un cáncer”. El ascenso de Satya Nadella al frente del ejecutivo de Microsoft ha cambiado enfoque y estrategia frente a sistemas operativos y plataformas rivales.
Cumpliendo el anuncio de una “nueva era de productividad”, Microsoft recomendó recientemente a Ubuntu como el mejor Linux para la nube y poco después anunció el soporte preferente en Azure de Red Hat Enteprise Linux. La semana pasada anunció el desarrollo de una versión del SQL Server para Linux que estará disponible en 2017, y la unión de Microsoft a la Fundación Eclipse, la organización sin ánimo de lucro responsable de la plataforma de código abierto del mismo nombre para desarrollo de Java.
Anuncios impensables hasta hace muy poco tiempo del que es el mayor productor de software mundial, en su mayor parte privativo pero con proyectos muy interesantes que afectan al Open Source y que confirman su trascendencia actual. Algunos ejemplos.
Open Source crea nuevas industrias
En 2014, Tesla Motors, el fabricante de coches eléctricos que está revolucionando la industria automovilística, entregó la totalidad de su cartera de patentes bajo código abierto, prometiendo no participar en batallas judiciales sobre la propiedad intelectual contra terceros que hicieran uso de ellas.
Aunque gigantes del sector como General Motors rechazaron la oferta de uso de patentes de Tesla, las posibles consecuencias de esto son un aumento en la innovación de automóviles eléctricos en toda la industria. Ellos significará en el futuro más coches eléctricos, más infraestructura para ellos y más consumidores interesados ??en su compra, incluyendo los propios modelos de Tesla.
Open Source en máquinas inteligentes
El pasado noviembre, Google liberó bajo código abierto su sistema de aprendizaje automático para Inteligencia Artificial, TensorFlow. El programa es gratuito para cualquier usuario, investigador o empresa interesado en utilizarlo.
Con esta liberación, Google espera acelerar la investigación sobre el reconocimiento automático lo que en última instancia permitirá que la tecnología funcione mejor para todo el mundo, construyendo una comunidad activa de código abierto que impulse el futuro de esta biblioteca, ofreciendo retroalimentación y contribuyendo activamente al código fuente, según la idea de los responsables de Google.
En un área similar, el CEO de Tesla junto a un equipo de expertos, anunciaron la donación de un fondo de mil millones de dólares para crear una empresa sin ánimo de lucro dedicada a la investigación y desarrollo de Inteligencia Artificial, OpenAI. El Director de investigación de la entidad será Ilya Sutskever, uno de los mayores expertos mundiales de la actualidad en machine learning y como CTO estará Greg Brockman, hasta ahora CTO de Stripe. Sam Altman (Presidente del brazo inversor de Y Combinator) y el mismo Elon Musk serán copresidentes.
Open Source hace feliz a los desarrolladores y contratadores
El concepto altruista de los desarrolladores inspeccionando proyectos de código abierto para corregir errores y añadir características, domina la imagen de código abierto. Pero la realidad es más complicada.
La página de GitHub de un programador, la plataforma de desarrollo colaborativo para alojar proyectos más importante del mercado, se ha convertido en una hoja de vida. Por la contribución a proyectos de código abierto, un desarrollador puede mostrar su trabajo e impresionar a los departamentos de contratación sin la molestia de una entrevista incómoda.
También tiene ventajas para los contratadores. Según el co-fundador de GitHub, “la mejor entrevista técnica es la que no tiene que celebrarse porque el candidato ya ha trabajado en uno de sus proyectos de código abierto. Una vez que la excelencia técnica se ha establecido de esta manera, todo lo que queda es verificar la adaptación a la cultura de la empresa y convencer a esa persona para venir a trabajar contigo”.
También tiene otros beneficios profesionales y sociales. Alguien que contribuya en un proyecto Open Source concreto, explica al instante unos intereses que sirven como tarjeta de visita. ¿Quieres encontrar un colaborador para trabajar en un proyecto? Simplemente charla con alguien que esté trabajando en la misma base de código que tú.
El código abierto no es perfecto y tiene sus desventajas, pero está claro que se ha convertido en un centro de innovación de software que va a continuar en el futuro, explican en ReadWrite.
Fuente: somoslibres
