En la actualidad, Ubuntu está disponible en su versión principal y en 7 sabores oficiales. Con toda probabilidad, esto cambiará próximamente, ya que, por lo menos, hay tres proyectos que están trabajando para entrar en la familia. El que más cerca está de conseguirlo es Ubuntu Cinnamon, pero también podrían convertirse en sabores oficiales Ubuntu Unity, quizá también Ubuntu Web, y el protagonista de este artículo, un UbuntuDDE cuyas últimas letras significan «Deepin Desktop Environment».
Ahora mismo, UbuntuDDE está disponible como «Remix», es decir, el apellido que le ponen a todas las versiones que han contactado con Canonical y quieren formar parte de su familia. La versión más actualizada es la 20.10 Groovy Gorilla, y yo, que estoy la mar de contento usando el entorno y apps de KDE, me he sentido tentado a probar la futura versión Deepin. Y lo he hecho, pero en una máquina virtual. ¿Y qué puedo decir? Que me ha gustado y, como mínimo, creo que es una bocanada de aire fresco que deberíais probar los que necesitéis un cambio.
UbuntuDDE: Deepin sienta muy bien
Uno de los puntos más importantes aquí es que UbuntuDDE no es Deepin Linux, lo que nació en 2009 y está basado en Debian. Lo que tratamos en este artículo es un sistema operativo basado en Ubuntu que usa el entorno gráfico Deepin. Y es bonito, muy bonito. Y, como usuario que ha tenido y aún conserva un viejo Mac, diré que muy Apple, en el sentido de que tiene un diseño muy atractivo visualmente y un dock en la parte inferior que por lo menos nos recuerda al de la manzana. O, si no lo hace todo lo anterior, sí lo hará el icono que muestra el puntero cuando está realizando alguna tarea (pensando), ya que es como el icono de Siri.
Por todo lo demás, tiene algunas características interesantes que merece la pena mencionar, como un menú de inicio o lanzador de aplicaciones que podemos modificar con tan sólo hacer un clic y pasar de un menú típico como el de Windows o Plasma a otro similar al de GNOME u otro en el que, también a pantalla completa, ordena las apps por tipo.
En cuanto a las aplicaciones que usa, podemos encontrar algunas de GNOME, pero muchas de ellas son del propio escritorio Deepin, como su app de configuración, su «Equipo», que es el gestor de archivos, o incluso una aplicación de capturas que nos permitirá también grabar la pantalla, lo que personalmente me parece muy interesante. Entre las apps de GNOME tenemos GNOME Software, el de toda la vida, el que nos permite ver todo tipo de aplicaciones, no pone por delante las Snap y encima le podemos añadir soporte para paquetes Flatpak.
De momento no, pero en el futuro…
Pero no os voy a mentir ni a deciros «¡Eh! ¡Vamos a pasarnos todos a UbuntuDDE!» o algo por el estilo. Yo soy usuario de KDE, y en el caso de que dejara Kubuntu, usaría Manjaro también en su versión KDE, lo que engloba el escritorio y sus aplicaciones. Pero sí quiero dejar claro que hay vida más allá del GNOME o Plasma, y no menciono el resto porque, por ejemplo, no soy un gran fan de Xfce, LXQt y entornos como Cinnamon o MATE tampoco son mis preferidos.
Que un usuario como yo, que sólo contempla como opciones reales GNOME y Plasma, sienta algo diferente al usar UbuntuDDE, es un síntoma de que tiene algo especial. En la actualidad, sigue siendo un proyecto independiente, pero un sistema operativo que una en sí mismo buena imagen, facilidad de uso, aplicaciones de GNOME, otras más interesantes de Deepin, y suponiendo que consiga tener a Canonical detrás, creo que debe ser un sistema operativo a tener en cuenta. Yo creo que seguiré en KDE, pero no descarto al 100% la posibilidad de serles infiel en el futuro.
Si estáis interesados en probarlo, podéis descargarlo desde este enlace, pero os recomiendo que hagáis como yo: hacerlo en GNOME Boxes. Y si queréis mejorar la experiencia, podéis instalarlo, pero también como máquina virtual. A no ser que os guste lo que veis y ya decidáis instalarlo de nativo.
Fuente: ubunlog
