Estuvo a punto de hacerse realidad, el primer móvil con Tizen OS podría haber llegado en marzo de mano de NTT Docomo —una de las operadoras más usadas en Japón—, sin embargo, dichos planes se ha quedado solamente en eso y al parecer la razón es que al final la operadora cree que no hay espacio para otro sistema operativo en el mercado de los teléfonos inteligentes.
«En este momento el mercado no es lo suficientemente grande como para apoyar tres sistemas operativos», aseguró un portavoz de NTT Docomo a la gente de Wall Street Journal en clara referencia a la dominación de Android y iOS.
Estas declaraciones contrastan bastante con las de Jun Otori, quien hace unos días aseguró que NTT Docomo estaba bastante interesado en lanzar un móvil con Tizen OS debido a que el sistema operativo móvil basado en Linux les permitiría «desarrollar con libertad cualquier cosa que imaginemos debido a que es un sistema operativo open source».
«Con Tizen, esperamos revitalizar los servicios desarrollados en Japón, así como crear nuevos servicios con más libertad», aseveró Otori en su día.
Probablemente la gente detrás de Tizen debería de probar suerte en mercados emergentes —como lo está haciendo Mozilla con Firefox OS— antes de dar el salto a mercados donde la competencia la acaparan dos compañías, Google y Apple. Otra opción sería echar un vistazo a la estrategia que Jolla está llevando a cabo con Sailfish OS. Los tres son sistemas operativos basados en Linux que quieren hacerse un hueco en el mercado de dispositivos móviles actual.
