Casi tan anunciado como el año de Linux en el escritorio, todo apunta a que 2021 podría ser el año del fin de LiMux en Munich. Las fuerzas del SPD y CSU que gobiernan en la capital bávara se han rendido definitivamente a Microsoft, proponiendo un cambio completo a Windows, en una resolución que deberá ser votada la próxima semana.

Para ello hacen suyas las propuestas del informe encargado a la consultora Accenture, en el que dibujaba “un estado desastroso de la infraestructura IT” de la ciudad y se proponía la reorganización dicho departamento.

Señalar que Accenture mantiene importantes lazos comerciales con los de Redmond a través del consorcio Ananade, el cual tiene como objetivo expandir el ecosistema de Microsoft facilitando la migración de las empresas a un mundo más digital.

El plan de ayuntamiento de Munich consistiría de forma específica en crear un cliente basado en Windows proporcionando una arquitectura unificada para toda la ciudad en las siguientes áreas: tratamiento de textos, hoja de cálculo, programa de presentaciones, lector de PDF, cliente de correo electrónico y navegador web. También otros productos de software tipo SAP.

No se menciona explícitamente dichos productos, más allá de que debería ser software estándar en el mercado: nombres como Microsoft Office y Outlook están en la mente de todos, para sustituir a LibreOffice y Mozilla Thunderbird.

El objetivo estratégico es que durante un tiempo se mantenga una infraestructura mixta, con programas capaces de funcionar tanto en Windows como LiMux (actualmente unos 15 000 ordenadores ejecutan este derivado de Ubuntu), pero solo hasta finales de 2020. A partir de entonces debería estar completada la migración hacia el software privativo.

Veremos como acaba el asunto la próxima semana. En general soy pesimista sobre el resultado, LiMux tiene pocos defensores en el consistorio de Munich (tan solo los Verdes y el Partido Pirata), una minoría respecto a la coalición roji-negra gobernante, que van de la mano en este asunto.

Podría ser el final de un proyecto pionero en el software libre que lleva implantado desde 2004 y que en su momento le supuso unos cuantos dolores de cabeza a Steve Ballmer.

Por ahora no se ha facilitado el coste de lo que supondría esta regresión hacia el monopolio de Microsoft.

 

Imagen: dorena-wm (CC BY-ND 2.0)

Fuente: Linux Magazin | lamiradadelreplicante

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