Jonathan Riddell, líder de facto del proyecto Kubuntu y encargado de cada lanzamiento de la distribución, se retira de la primera línea, aunque “no se va lejos”. “Voy a estar ayudando más a KDE“, apunta en su mensaje de despedida.
Jonathan Riddell fue forzado unos meses atrás a dejar su puesto al frente del Kubuntu Community Council por “repetidas faltas de respeto y violaciones del código de conducta”. Desde entonces la situación parece haberse torcido de manera definitiva, a pesar de que el mal rollo se venía mascando desde hacía bastante tiempo.
El principal motivo de desacuerdo entre Riddell y la mesa de Ubuntu se debía a las licencias que exige Canonical en sus paquetes, que también afectan al uso de la marca Ubuntu en proyectos asociados como pueden ser la distros que componen el abanico oficial, de las que ayer tuvimos descarga.
Sin embargo los enfrentamientos entre Riddell y la cúpula de Ubuntu vienen de antes y por diferentes motivos. Riddell se plantó ante Mir, el servidor gráfico propio de Ubuntu y pidió explicaciones acerca de las donaciones que recibe Ubuntu y que supuestamente nunca llegan al resto de sabores.
Y ahora Kubuntu se queda sin el tipo que ha estado a la cabeza del proyecto todo este tiempo, aunque desde hace unos años cobra su sueldo de Blue Systems, compañía desarrolladora de Netrunner y ligada al entorno KDE en varios aspectos. ¿Qué va a pasar con Kubuntu?
En un principio, nada. La advertencia de que “el equipo de Kubuntu está comprometido a lanzar [Kubuntu] 15.10 en octubre“, pero “actualizaciones, correcciones y futuras versiones son inciertas actualmente” ha desaparecido de las notas de lanzamiento de la distros. Pero alguien va a tener que dar un paso al frente y hacerse cargo.
Con todo, Kubuntu es un producto lo suficientemente sólido como para permanecer, aun con cambios de calado de por medio. Como muestra, un vídeo de Kubuntu 15.10, lanzada ayer mismo.
Fuente: muylinux