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El arranque dual es una excelente manera de aprovechar las fortalezas de dos sistemas operativos, como Windows y Linux, en un solo equipo. Ya sea que necesites Windows para aplicaciones específicas o juegos, y Linux para desarrollo o tareas administrativas, esta guía te llevará paso a paso para configurar un sistema de arranque dual.

¿Qué es el arranque dual?

El arranque dual permite instalar y utilizar dos sistemas operativos en un mismo equipo, eligiendo cuál iniciar cada vez que enciendes tu computadora. Es una solución práctica para quienes necesitan funcionalidades exclusivas de diferentes sistemas operativos.

Ventajas del arranque dual:

  • Flexibilidad: Alterna entre Windows y Linux según tus necesidades.
  • Economía: Evita la necesidad de adquirir un segundo equipo.
  • Compatibilidad: Aprovecha el soporte de Windows para aplicaciones y Linux para tareas técnicas o personalizadas.

Requisitos previos para un arranque dual

Antes de empezar, asegúrate de cumplir con los siguientes requisitos:

  • Espacio libre en el disco duro: Al menos 50 GB para Linux.
  • Un USB o DVD de instalación: Para ambos sistemas operativos.
  • Copia de seguridad de tus datos: Cualquier error podría causar pérdida de información.

Pasos para configurar un arranque dual

1. Prepara tu computadora

  • Haz una copia de seguridad: Antes de realizar cualquier cambio, resguarda tus archivos importantes.
  • Verifica el sistema UEFI o BIOS: Accede al menú del firmware y asegúrate de que el modo de arranque sea compatible con ambos sistemas operativos. Linux y Windows funcionan mejor en modo UEFI.

2. Instala Windows (si no está instalado)

Si ya tienes Windows instalado, puedes omitir este paso. De lo contrario:

  • Descarga el archivo ISO de Windows desde el sitio oficial.
  • Usa una herramienta como Rufus para crear un USB de arranque.
  • Instala Windows, dejando espacio en el disco para Linux.

3. Reduce la partición de Windows

Para instalar Linux, necesitarás liberar espacio en el disco duro:

  • En Windows:
    • Abre la herramienta "Administración de discos".
    • Haz clic derecho en la partición principal (C:) y selecciona "Reducir volumen".
    • Asigna al menos 50 GB para Linux.
  • Deja el espacio sin asignar: No crees particiones; el instalador de Linux lo manejará.

4. Instala Linux

  • Descarga una distribución Linux: Algunas distribuciones populares son Ubuntu, Linux Mint o Fedora.
  • Crea un USB de arranque: Usa herramientas como Etcher o Ventoy.
  • Inicia desde el USB:
    • Reinicia tu computadora.
    • Accede al menú de arranque (generalmente con las teclas F12, ESC, o DEL).
    • Selecciona el USB como dispositivo de arranque.
  • Sigue el instalador de Linux:
    • Elige la opción "Instalar junto a Windows" o selecciona el espacio sin asignar para crear particiones manualmente.

5. Configura el gestor de arranque

Después de instalar Linux, el gestor de arranque GRUB será el encargado de permitirte elegir entre ambos sistemas al encender el equipo.

  • Si GRUB no aparece, arranca en Linux y usa el comando:
    sudo update-grub
  • Este comando detectará automáticamente Windows y lo añadirá al menú de inicio.

6. Optimiza el arranque dual

  • Establece el sistema operativo predeterminado: En Linux, edita el archivo /etc/default/grub para definir cuál sistema se cargará por defecto.
  • Prueba ambos sistemas: Asegúrate de que puedes arrancar tanto en Windows como en Linux sin problemas.

Consejos útiles para el arranque dual

  1. Administra los sistemas con cuidado: Realiza actualizaciones y configuraciones en cada sistema sin interferir con las particiones del otro.
  2. Usa un sistema de archivos compartido: Crea una partición en formato NTFS para compartir archivos entre Windows y Linux.
  3. Habilita el modo seguro (Secure Boot): Asegúrate de que tu distribución Linux lo soporte para mayor seguridad.

Configurar un arranque dual entre Windows y Linux es una excelente manera de sacar el máximo provecho de ambos sistemas operativos. Aunque el proceso puede parecer intimidante al principio, seguir estos pasos garantizará una instalación exitosa y sin complicaciones. Así que, si estás listo para experimentar lo mejor de ambos mundos, ¡manos a la obra!

 

Fuente: somoslibres

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