ubuntu-gnome

Con el cambio de Unity a GNOME Shell los usuarios de Ubuntu perdieron características únicas, pero Canonical se ha esforzado para que la experiencia de escritorio siga siendo confortable, incluyendo por defecto funcionalidades tan elementales como soporte de iconos en el escritorio o en la bandeja de sistema. Más allá de lo básico, sin embargo, las extensiones de GNOME ofrecen importantes posibilidades de mejora.

Pero, cuidado, porque instalar extensiones a lo loco puede resultar más perjudicial que beneficioso, ya que aumentan el consumo del escritorio, así como pueden generar problemas de rendimiento y estabilidad. Hay que elegir bien qué se instala y, llegado el caso, quizás valga más la pena reemplazar GNOME por un escritorio diferente que incorpore las funcionalidades deseadas, antes que recargar GNOME Shell con extensiones.

Soy de la opinión de que en su estado actual GNOME cumple con lo que cualquiera podría esperar de un escritorio moderno, y con tres o cuatro extensiones que le pongas tendrás suficiente para trabajar con normalidad. Si hablamos del GNOME de Ubuntu, que como decimos viene con lo básico cubierto, la lista se reduce si cabe y dependerá del usuario decidir qué añadirle.

Por ejemplo, habrá quien prefiera una disposición de escritorio clásica, para lo cual basta con instalar una extensión como Dash to Panel y configurarla al gusto (un aviso con respecto al artículo enlazado: ya no es necesario instalar Clock Override, puesto que en las últimas versiones de la imprescindible herramienta de retoques han agregado las opciones correspondientes).

No obstante, sin entrar en gustos sobre el estilo del escritorio o en necesidades específicas, hay tres cosas que tampoco Ubuntu trae por defecto y que me parecen básicas en cualquier escritorio Linux moderno que se precie. Conseguirlas es tan sencillo como instalar las extensiones adecuadas.

Gestor del portapapeles

De lo útil que es tener un gestor de portapapeles a mano ya hablé en su momento, por lo que en esta ocasión me limito a comentarte que de las diferentes alternativas disponibles, mi preferida es GPaste, más que una extensión, una completa aplicación con indicador en la bandeja de sistema e interfaz adicional.

gsu1

Esquinas calientes

Por defecto, GNOME Shell solo activa la esquina superior izquierda, donde acercando el cursor se muestran las «actividades» y las ventanas abiertas. Pero este comportamiento se puede cambiar para las cuatro esquinas con cuatro opciones para elegir: mostrar las actividades, el escritorio, el lanzador de aplicaciones o ejecutar un comando personalizado. La extensión que te abre la posibilidad de hacerlo es Custom Hot Corners.

gsu2

Custom Hot Corners

Cambio de wallpaper automático

Por último y a pesar de lo superficial, GNOME Shell es de los pocos escritorios que no tiene la opción de cambiar automáticamente el fondo de pantalla, lo que una vez más se soluciona instalando una extensión. De las que he probado, Random Wallpaper es la que más me ha convencido, ya que permite descargar imágenes de fuentes de calidad de manera automática o manual con un clic en base a etiquetas y resolución, guardarlas en disco…

gsu3

Random Wallpaper

¿Cómo instalas estas extensiones? Si estás en Ubuntu, las encontrarás en la tienda de aplicaciones.

Yo con esto me conformo; ¿y tú? Recuerda que hablamos de funcionalidades básicas, útiles para cualquier usuario.

 

Fuente: muylinux

¿Quién está en línea?

Hay 22846 invitados y ningún miembro en línea