Una de las distribuciones GNU/Linux más comprometidas con el escritorio KDE y las tecnologías Qt ha lanzado una nueva versión, es la 2015.11 de Chakra que nos trae la migración al escritorio Plasma 5, reemplazando al veterano KDE 4, algo muy esperado por los fans de la distro.
Es la primera de la serie Fermi, y al igual que el físico italiano, los desarrolladores de la distro en su particular Proyecto Manhattan, han manejado esta transición entre versiones de KDE con un exquisito cuidado, como el material delicado que todavía es Plasma 5, evitando cualquier tipo de fusión nuclear que hiciera saltar por los aires el desktop, debido a un lanzamiento precipitado.
Plasma 5.4.2, KDE Aplications 15.08.2, Frameworks 15.08.2 forman la base del nuevo escritorio de Chakra, que llega adornado de forma muy elegante por el artwork de Heritage –fork del tema Caledonia— y nuevos fondos de escritorio.
Si a alguno no le gusta el look propio de la distro y prefiere algo más estándar, en la preferencias del escritorio nos encontramos como opciones al veterano oxygen y el nuevo breeze – que como sabéis, es el theme por defecto para Plasma 5, diseñado por el equipo de KDE–.
Plasma 5 supuso también un cambio en el gestor de inicio de sesiones por defecto en KDE, al que Chakra tampoco ha sido ajena sustituyendo a KDM por sddm 0.12.
En el asunto de la instalación también vemos cambios, se dice adiós al obsoleto Tribe y toma su puesto Calamares, un instalador ecléctico capaz de funcionar en cualquier tipo de distro, y que nos encontramos habitualmente en distros como Manjaro o KaOS.
Del asunto del software se encarga Octopi que nos trae de regalo un limpiador de caché, algo muy útil para derivadas de Arch Linux o con raíces en la misma, esto último el caso de Chakra.
En las fuentes de software observamos una nueva estructura de repositorios –lib32, core, desktop, gtk–, diseñada para hacer la vida más fácil, tanto a usuarios como desarrolladores.
A la hora de dar un paseo por el menú nos encontramos lo mejor de KDE/Qt , no falta prácticamente de nada: suite ofimática caligra, qupzilla como como navegador, tomahawk como reproductor musical, bomi como media player, Kdenlive para editar video, Kmail (editor de themes incluido) como gestor de correo, Kontact, lector de feeds Akregator, cliente IRC konversation, Korganizer, editor de texto Kate, Knotes, suite artística Krita, cloud storage manager, K3b, terminal Yakuake, incluso un miniBacktup para nuestras copias de seguridad…
Son más de 5000 paquetes –tranquilos no os voy a aburrir con todos– pero destacar también la buena selección de software por parte de sus creadores, en otros elementos, como el creador de memorias usb imagewriter –a la gente que todavía recomienda unetbootin, debería Linus quitarles el carnet de linuxero,– o el mencionado Calamares.
Los veteranos de la distro echaran de menos a Kapudan una especie de asistente que se ejecuta después del arranque y permite ajustar preferencias del escritorio o instalar algún tipo de software adicional. El motivo de su ausencia es que todavía no ha sido portado a KDE Frameworks 5, aunque todavía es posible encontrarlo en los repositorios.
En cuanto a las tripas de la distro, una versión LTS del kernel (4.14), sistema de inicio systemd 218, Qt 5.4.1, mesa 10.5.0 y amplia selección de drivers para gráficas Nvidia, Intel y AMD.
Mas información en la web del proyecto, desde donde también podéis descargar esta Chakra 2015.11 Fermi en versiones exclusivas de 64 bits.
Fuente: lamiradadelreplicante
