clementine

Una alternativa muy interesante para reproducir audio que ha surgido en el último tiempo es Clementine, un ligero reproductor del que una vez nos hablo MetalByte cuando se lanzó la versión 0.5 del programa y que se destaca principalmente por estar inspirado en Amarok 1.4 de KDE. Sin embargo demuestra ser mucho mas que eso.

Clementine, como buen port, hereda muchas de las características del antiguo Amarok e incorpora algunas propias, entre ellas: la reproducción de contenido local e internet, la posibilidad de crear listas de reproducción inteligentes y dinámicas, visualización de letras de canciones, biografías y fotos del artista, transcodificación de música, importación y exportación de listas de reproducción, edición de las etiquetas de archivos MP3 y OGG, uso de visualizaciones projectM y mucho más.

¿Qué lo hace especial? Que “pese a ser Amarok 1.4? utiliza las bibliotecas Qt4, aprovechando así las nuevas tecnologías de KDE pero manteniendo la esencia del legendario reproductor. Por otra parte es práctico, ligero y multiplataforma, pudiendo ejecutarse en Linux, Mac OS y Windows sin problemas. Además mantiene un activo desarrollo que, esperamos, lo lleve mucho mas allá de lo que logró Amarok 1, luego de que su segunda versión cambiara completamente de rumbo.

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Recientemente fue lanzada una nueva versión de este reproductor con varias novedades, entre las que se destaca el nuevo diseño basado en pestañas laterales, información sobre las canciones y el artista extraídas de Last.fm, Amazon y Wikipedia; listas de reproducción inteligentes, además de la corrección de varios detalles y el haber agregado varias características que lo integran aun mejor con con los escritorios Linux, incluyendo las notificaciones y applet de sonido de Ubuntu.

Puedes ver lista completa de cambios aquí y descargar a través de su página de descargas.

En definitiva, es una buena alternativa que se suma a la reñida competencia de Reproductores de Audio en Linux. Por supuesto, finalmente se trata de un tema de gustos y colores, y dentro de eso Clementine se ha ganado su lugar, entre los fanáticos del primer Amarok, y entre quienes apuestan por un reproductor ligero, sencillo y funcional, y aunque en realidad me gusta bastante el nuevo Amarok que ofrece el proyecto KDE, creo que esa es la idea, poder elegir.

 

Fuente: muylinux

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